Lucía Barquero Schmaeing (Estudiante de 2º de carrera de Doble Grado en Comunicación Digital y Audiovisual) Linkedin Personal
El compromiso y largoplacismo es un bien que la inflación está elevando al nivel del oro. Esmérate en pulir estas cualidades si quieres sobrevivir en la caótica jungla laboral.
Recientemente estuve en una formación sobre talento y el nuevo formato de entrevistas que se realizan hoy en día para encontrar a la nueva adición al equipo en la sede de Adecco en Pozuelo. Aprendí mucho esa tarde, pero, sobre todo, durante la ronda de preguntas del final. Un chico se me adelantó al preguntar algo que me interesaba mucho y que sin duda os interesa a vosotros: ¿Cuál es la cualidad que veis que hace más falta en la generación de hoy en día y que si se tiene, se valora muchísimo?
La respuesta es muy simple y tiene mucho sentido: el compromiso y no ser cortoplacista. En un mundo en el que tenemos todo a la palma de nuestra mano, en el que ya no tienes que esperar ni cinco segundos de anuncios para ver tu serie favorita por streaming y donde recibimos dopamina con cada like o estímulo de
nuestro móvil, hemos ido adaptando una actitud muy cortoplacista y poco comprometida con una causa o algo de larga duración. Yo personalmente lo he visto en muchos de mis amigos o compañeros, que cada vez tienen menos “aguante” por decirlo de alguna manera. Pues chavales, toca ir al “gym de la vida” a acondicionar nuestra mente a hacer largos recorridos y no sprints. Si tu fueses una empresa ¿invertirías tiempo, personal y recursos en formar a alguien que se irá ya formado a otra empresa? El compromiso es clave y garantiza que se deposite confianza en ti.
Hazme el favor y ¡esfuérzate! Todo siempre cuesta al principio, sobre todo cuando te estas reeducando para cambiar tu manera de pensar o trabajar, pero es fundamental para tu futuro laboral y realmente para el ámbito personal también. Nos aburrimos muy rápido y todo es muy volátil hoy en día, pero la mayor satisfacción viene de lo que nos ha costado, de lo que de salimos dominando después de haber entrado con una experiencia equivalente a menos 3. No debemos confundir cortoplacismo con flexibilidad. Debemos de ser flexibles para adaptarnos a las adversidades y sobrevivir, no migrar de un lado al otro y crear nuestras propias adversidades.
Así que, por favor, haz como Buzz Lightyear y mira al infinito y más allá en vez de quedarte en un intervalo de seis meses. Tu “yo” del futuro y tu “yo” en busca de empleo te lo agradecerán.
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